Tan insólita como lamentable situación vivió Silvio Romero cuando terminó el entrenamiento matutino de Instituto de Córdoba. Al salir, se percató de que le habían robado las cuatro ruedas de su auto, que se encontraba estacionado dentro del predio La Agustina, donde practica la Gloria.
El delantero llegó como todos los días con su Nissan X-Trail y al finalizar la práctica se encontró con el vehículo totalmente desmantelado. Instituto recibirá a Independiente este domingo desde las 17.
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