¿Se puede pasar de ser villano a héroe? La respuesta es sí. Y este es el caso de Juan Carlos Kopriva, quien le ganó una final por un ascenso a Excursionistas y, 15 años después, le devolvió ese ascenso al Verde llevándolo a la Primera B tras seis años. Ahora, ya más tranquilo, habló con Olé y contó cómo se prepara para la próxima temporada
-¿Cómo vivís este cierre de año?
-Muy tranquilo. Cumplimos el objetivo de poder ascender a este equipo, que es uno de los grandes de la categoría, y con la cantidad de posibilidades que había debíamos hacerlo, no quedaba otra.
-Después de ganar la final, ¿seguiste viendo el Reducido o apagaste la tele y disfrutaste de las vacaciones?
-Sí, seguí viendo todo. Inclusive fui a ver varios partidos para poder observar a jugadores que me interesaban y que estaban participando. Siempre estoy viendo todas las categorías y a todos los rivales. Porque así es la mejor manera de poder identificar si nos gusta. Porque después de todo, por video, es muy irreal. Siempre te ponen las mejores jugadas y perdés la perspectiva y los movimientos.
-¿Vas a seguir al mando del equipo en la Primera B? ¿Tuviste otras ofertas antes de arreglar tu continuidad?
-Sí, vamos a seguir. Ya renovamos el contrato. Apenas ascendimos, arreglamos con el presidente Javier Méndez Cartier todo y vamos a ir por más.
-¿Qué expectativas tienen de cara a la próxima temporada? ¿Van a buscar pelear o lo primordial es mantener la categoría?
-No me conformo con que solamente el equipo se quede en la categoría. La conozco mucho, queremos estar peleando arriba, pero primero tenemos que afianzar al equipo, hacerlos entender que es una categoría superior, que hay otro nivel, que hay que prepararse bien desde lo mental y desde lo físico.
-Llegaste cuando el equipo estaba casi en los últimos puestos y lo sacaste campeón. ¿Cómo te sentís desde lo personal después de eso? ¿Cuál fue la clave que les dio el título?
-Lo primero que hicimos fue levantar a los chicos desde lo anímico, tratar de mejorar desde lo físico y, a partir de ahí, armar un buen equipo. La clave para mí fue hacernos fuertes de local y tener regularidad afuera. Esto también se dio por el gran trabajo del cuerpo técnico, con Víctor Osés Lamela, del profe Diego Veiga, el entrenador de arqueros Fabián Luchetti, el cuerpo médico y nutricionistas del club. Además del apoyo del presidente y la dirigencia.
-En el 2008 hiciste historia con Barracas Central y lograste el ascenso a la Primera B frente a Excursionistas. Ahora, 15 años después pasaste de ser villano a héroe, ¿qué sensaciones te deja toda esta historia?
-Y, es muy real lo que decís. Recuerdo que en ese campeonato Excursionistas nos llevaba 13 puntos de ventaja y jugábamos la última fecha de la primera rueda en el Bajo Belgrano. Yo le avisé a Chiqui Tapia, que en ese momento era el presidente de Barracas, que si perdía me iba, pero él me decía que no. Ganamos al final y a partir de ahí comenzó la remontada. En la última fecha llegamos iguales en puntos, empatamos y tuvimos que ir a un desempate en la cancha de Atlanta. Lo ganamos 1-0 y fue una alegría enorme. Ahora se vio casi todo lo mismo entre nosotros y San Martín de Burzaco. Porque ellos nos sacaron muchos puntos y en la última fecha quedamos empatados y les ganamos después 1-0 en la final en La Plata. Y la misma gente me decía: “Me hiciste llorar antes y ahora también me hiciste llorar pero de alegría”. Uno es un profesional y siempre le toca dar lo mejor donde le toque trabajar.
-¿Qué mensaje le dejás a la gente de Excursio para el 2024?
-Desearles un feliz año. Fue maravilloso compartirlo con ellos. Demostraron un cariño inmenso y nos respetaron mucho desde que llegamos. De nuestra parte, siempre tendrán lo mejor para el club. Hoy, en mi familia, todos somos de Excursionistas. Ojalá que cuando levanten la copa y brinden, los hinchas sigan creyendo en que podemos lograrlo.
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