“Un susto en el desierto y lo picante me marcaron, también un pendiente que quedó por cumplir» – Las noticias más importantes de Chaco

Por Patricia Muñoz

Marcelo Mantaras es periodista deportivo, relator deportivo, trabaja en Radio Máster (89.9 del dial en Resistencia) y forma parte del equipo El Ascenso x3 que hace todas las transmisiones del fútbol nacional en Buenos Aires.

Marcelo es chaqueño y tuvo la fortuna de ser el periodista de la región que viajó a Qatar. El conductor del “Aguante Deportivo” fue elegido para formar parte del equipo que lidera Víctor Hugo Morales para Radio Nacional, con una comitiva de cuatro argentinos entre camarógrafos y productores que informan a diferentes plataformas del país.  

Diciembre es un mes de fiesta, no solo por Navidad y Año Nuevo, sino porque además es de la Selección, de los argentinos. En 2022 la Scaloneta logró un gran sueño: la Copa del Mundial, y a pesar de que fue hace un año cuando todo comenzó, es como si hubiese sucedido ayer, y esa sensación será así por siempre. El fútbol logró que los argentinos estén unidos por la camiseta y que las grietas se disolvieran, eso quedó grabado en los corazones de todos los que habitan este país, pero también en el mundo donde hay “hinchas argentinos”. También se lo podrá ver y reproducir más de una vez en dos películas que quedarán para la historia: “Muchachos”  y “Elijo creer”.

Marcelo Mantaras estuvo un mes en Qatar, antes de que empiece el evento deportivo más importante del mundo y volvió un día después del Argentina Campeón. Primero estuvo alojado en esos lugares tipo conteiner que se prepararon para los turistas y después en un departamento. Hasta allí llegaron los fanáticos de Argentina sin quererlo. Es que el periodista había llevado una valija repleta de remeras de Argentina que le había dado Lotería Chaqueña y que empezó a regalar. Se fue corriendo la voz y de un día para otro empezaron a tocarle el timbre para pedírselas. Regaló las 60 que llevó, e incluso una suya porque había una cola de fanáticos que no sabían hablar español, pero que se entendían en un solo idioma: el fútbol y el fanatismo por la Sacaloneta.

Lo picante fue otra de las cosas por las que se cambió de alojamiento. Aguantaron hasta tres días. Las hamburguesas eran picantes, las pizas también e incluso el té y las galletitas dulces. De esto hay una anécdota: Ya una tarde, para acompañar el mate compró una galletita, parecía la Mielcitas, que le encantan. La compró, pero sólo pudo probar una: era picante. La guardó y la llevó a la cancha. Marcelo se la hizo probar a los colegas, no quería ser el único con esa experiencia.

_ Fuiste a Qatar a cubrir el Mundial, ¿cómo fue esa experiencia para vos?

_ La verdad que pensar a partir del comienzo del aniversario que fue a partir del 20 de noviembre uno empieza a vivir todas las emociones de nuevo como si fuese el año pasado (2022) porque fue una experiencia, primero sorpresiva por la convocatoria y segundo muy fuerte, en cuanto a emociones y a vivir mi primer mundial, hacer la cobertura de un Mundial en un país tan lejano como Qatar fueron emociones muy fuertes y si a eso le agregamos cómo se desarrolló la Copa del Mundo y como terminó la Copa del Mundo se sumaron un montón de experiencias y de emociones que son únicas y realmente inolvidables.

_ ¿Cuál es el momento que más te marcó?

_ Y hay distintas etapas, desde que pisás Qatar y te encontrás con una cultura diferente hasta el primer partido de Argentina que pierde y las preguntas de qué pasa ahora; y obviamente la final de la Copa del Mundo. Encontrarme en ese lugar, justo, en el estadio Lusail con una Argentina consagrándose campeón, pero fueron distintas etapas y fueron marcando depende de las circunstancias, del momento. Obviamente cuando Argentina se consagra campeón fue muy fuerte y me marcó porque hablé con algunos colegas que habían ido a otros mundiales y fueron a hacer la cobertura, pero no tuvieron la oportunidad de verlo a Argentina Campeón del Mundo y entonces era muy emocionante, muy fuerte, y creo que eso me marcó también.

_ Sos fanático de los Mundiales o como muchas personas que dejaron de creer en los Mundiales y los miraban para acompañar a Argentina pero sin ilusionarse.

_   Soy fanático del periodismo deportivo, del relato, del fútbol. El Mundial es el evento máximo, creo que para un jugador es lo más grande que puede haber y para un periodista cubrir un Mundial es lo más importante que puede haber. Entonces lo viví de una manera muy especial. De hecho es muy raro porque el Mundial de Brasil de 2014 estábamos más cerca y no pude estar. No puede ir ni siquiera un partido, y es tan curioso porque termino yendo a 14 mil kilómetros de Argentina.

_ ¿Cómo fue la convocatoria?

_Yo trabajo en El Ascenso x3, el equipo de Daniel Cacioli en el cual hacemos transmisiones del Nacional B y de algunos partidos del Nacional y somos parte de una plataforma de relatores que está la de Víctor Hugo Morales. Ellos me venían escuchando, ya me habían comentado ocho meses antes que había una posibilidad, no de ir al Mundial, sino que estaban escuchándome, y faltando cinco meses, me mandan la invitación: queremos que como voz del interior seas parte del equipo.

Fue una emoción muy grande, una sorpresa y una responsabilidad porque desde el momento que me convocan había que generar un montón de cosas. El tema de cómo iba a ser el viaje, los costos, quien se iba a hacer cargo de eso, y fundamentalmente el tema de la acreditación y la Visa, la famosa hayya card que era todo un problema para poder conseguir. Así que fueron distintos procesos, pasito a pasito, pero hasta que no estuve con el boleto en la mano y la acreditación no lo podía creer. Una vez que tuve todo eso recién empecé a caer con lo que iba a poder vivir.

_ ¿Cuántos días estuviste en Qatar?

_  Llegué el viernes 18 (noviembre) a Qatar, dos días antes de que comience la Copa y me volví un día después que terminó. Llegué cuando había muy pocos aficionados todavía. Incluso los primeros tres días paré en una especie de Villa para aficionados, las famosas cabinas, esas tipos conteiner, que estaban equipadas. Yo llegué primero, después Leandro que es el operador de Radio Nacional Buenos Aires, él se sumó el sábado y empezaron a llegar distintos periodistas que estaban en otro sector.  Cuando llegué estaba todo desierto, no había gente, nada, y cuando me levanté el sábado a la mañana y salí a caminar me encontré con una multitud de todos los países y ahí se empezó a vivir el Mundial. Volví un día después cuando terminó todo, cuando ya las calles de Qatar estaban vacías. Muchos argentinos en las primeras horas de la mañana del lunes ya volvían, tenían vuelo programado. Yo recién a las primeras horas del martes, a la madrugada. O sea que viví esa sensación de estar a 14 mil kilómetros y viendo que Argentina era una revolución  recibiendo a la Selección. Fueron 31, casi 32 días allá.

_ ¿Cómo es la cultura?, Si tenés que comparar Argentina con Qatar, ¿qué es lo bueno y qué es lo malo?

_ Yo creo que ellos se prepararon para recibir a los aficionados de todo el mundo  y cambiaron un poco su cultura que es muy estricta. Esto de que no se podía usar bermuda, que la mujer no podía usar musculosa, eso se dejó de lado durante el Mundial porque hemos visto que había muchos argentinos, argentinas. Creo que ellos dejaron de lado eso durante el Mundial. Es una cultura totalmente diferente, las comidas son totalmente diferentes, picante, una locura adaptarnos, y por eso tuvimos que cambiarnos a un departamento y hacernos nuestra propia comida. Es una cultura totalmente diferente respecto a los horarios que tienen ellos de oración. Vos vas caminando por las calles y de momento empieza a escucharse por los parlantes que anuncian ese momento de oración y todos paran. Es muy diferente a nuestra cultura, pero ellos durante ese Mundial se adaptaron y mostraron  una imagen diferente, de hecho es real eso que se mostraba por TV que los jeques regalaban cosas. Era como mostrar una imagen que no es la que se vive día a día en la cultura de ellos.

_ ¿Te trataron bien?

_ No tuve ningún problema. Yo había visto que algunos medios tenían algún problema cuando filmaban desde algunos lugares, que hubo amenazas. Me asusté una vez en el desierto que estaba haciendo un vivo con una radio y para una camioneta y me habla en árabe. Me asusté porque me dije estaré filmando en un lugar que capaz no podía. Y me pregunta de dónde era y yo le digo Argentina, Argentina le digo y el tipo transformó la cara y dijo: Messi y se bajó y me llama. Yo estaba asustado todavía. Yo tenía puesta una túnica árabe y me sacó y empezó a mostrar cómo me tenía que colocar y ahí me di cuenta que era un gesto de amistad, y después no hubo problema. La verdad que el trato con nosotros, con el grupo, ningún problema.

_ ¿Con quién te tocó hacer una nota y cuál fue la que más te marcó?

_ Mi trabajo, yo como relator, no me tocó relatar, pero fui como un periodista de la previa y pos partidos.  O sea yo tenía contacto con la gente que llegaba a los estadios argentinos. Las previas y las pos, que eran las más lindas porque yo me acuerdo que después de Arabia mucha gente salía y no entendía nada y no sabía ni que decirte porque fueron a ver a Argentina ganar el primer partido y perdimos y era una sensación de mucha gente que hizo un esfuerzo para estar allá y de golpe Argentina dependía de no perder más para clasificar a los octavos de final. Yo viví mucho eso. Después tuve la posibilidad de hablar con el Kun Agüero, de hacer una nota con él y con (Oscar) Ruggeri, que era la gente con la que podíamos estar. La radio, el equipo hizo notas con los futbolistas, me hubiese encantado poder tener una nota con Lionel, no la pude hacer, pero yo tuve más contacto con la gente.

_¿Te gusta el cine?

_Me encanta el cine.

_Se estrenan dos películas: Muchachos y Elijo creer. ¿Vas a ir a verlas?

_Tengo muchas ganas de ir a verlas. De hecho tengo un amigo que trabaja en una de las películas, me llamó hace dos meses y me dijo: ché vi un video tuyo que estás llorando en la final. Y le digo yo: sí lo subía a las redes. Y me cuenta que han mandado una cantidad de cosas, y quedaste entre las 300 imágenes para la película, van a quedar 80. No sé si vas a quedar porque no depende de mí, sino del productor. La verdad no sé si estoy o no estoy. No importa, yo quiero ir a ver la emoción y todo lo que se vivió. Si  llego a estar obviamente será una emoción más grande. Creo que todos los argentinos queremos ver eso. Volver a vivirlos, a ver a la gente, la emoción. Fue muy fuerte. Muy intenso. Estar lejos y abrazarse con gente que no conocías. A mí me tocó la final estar al lado de una persona mayor, del interior de Santa Fe  y él no quería mirar lo penales. Yo le decía, no me acuerdo el nombre: señor, mire porque esto es historia, si lo hace Montiel somos campeones y si no lo hace se sigue pateando. Y él no lo quiso mirar, pero le digo: mírelo porque vino acá, en este momento, y él se dio vuelta y no lo miró. Entonces hay un montón de emociones y creo que la gente se va a a volver a reencontrar con eso momento maravilloso.

_Es algo que no se va a olvidar…

_ Es imposible, por ejemplo en mi caso no sé si voy a poder volver a ver a Argentina nuevamente Campeón del Mundo estando en un mundial. En el  78 era muy chiquito, en el 86 lo vi desde la tele, pero estar en una Copa del Mundo en el lugar donde se jugó y con muchos argentinos porque Argentina estaba revolucionando Qatar y Doha por todos lados, uno se encontraba con argentinos por todos lados y ver a la Argentina campeón del mundo, aparte, y después de lo que fue esa gran final  contra Francia es inolvidable, muchas veces las redes sociales te recuerdan imágenes, yo estuve subiendo estos días también algunos recuerdos y es inevitable que me acuerde el momento y que me caiga una lágrima porque es y va a ser inolvidable.

_ ¿Nosotros como chaqueños teniéndote allá no de te supimos aprovechar?

_ Yo cuando viajé de acá, hubo algunos medios que me llamaron y yo no tuve ningún problema. En mi trabajo, en mi función, y no sea el momento en que yo estaba trabajando, yo podía salir, no tenía ningún problema. Tuve la disponibilidad. Creo que sí, por ahí no se aprovechó todo lo que se podía. Se pudo haber hecho más. Yo llevé mi bandera de Chaco. Yo representaba al Chaco, las fotos que subí fueron con la bandera del Chaco.  No digo que no se valoró, sino que no se aprovechó la posibilidad de que hubo un periodista chaqueño esté en ese momento histórico, porque es un momento histórico e inolvidable.

_¿Vos sos del interior?

_ Yo nací en Villa Ángela, y por eso cuando hablaba del vivo me refería a que un colega de Villa Ángela me llama un día y me pregunta: ¿Marcelo te podemos sacar al aire acá en Villa Ángela? Y le digo, cómo no voy a salir en mi ciudad a la que tanto quiero. Salí al aire y no solo una vez sino, dos y tres veces. De hecho la nota que estaba saliendo con ellos era cuando llegó este árabe en el desierto y él me hablaba, me decía, hola, hola, y yo estaba mudo porque tenía miedo por lo que pasaba, pero sí, soy el interior.  

27 años de profesión y una familia

Marcelo Mantaras tiene 27 años de profesión. “25 años cumplimos con el programa, dos años más de periodista, y dedicándonos siempre a esto, al periodismo deportivo”, afirma. Estudió en Córdoba y se volvió al Chaco, cuando estuvo acá surgió una posibilidad en un canal cordobés, pero él ya había regresado y a pesar de que no trabajaba todavía de periodista decidió quedarse y apostar. Entre risas nos cuenta: “Yo empecé de grande”, es que cuando Marcelo arrancó con la profesión tenía 27 años.  

“Estoy casado, cuatro hijos: tengo dos varones y dos hijas. También fue muy fuerte ese momento, porque lo primero que pasó después de la Argentina Campeón del Mundo fue hacer una videollamada con ellos y tenerlos a todos enganchados en el celular y yo en el estadio mismo. Lloraban ellos, lloraba yo. Recuerdo que mi vieja me mandaba mensajes, preguntándome, y que le conteste después de la final a penas terminó; y yo no contestaba porque estaba viviendo ese momento y después leía: ché no se habrá desmayado de la emoción”, cuenta Marcelo como anécdota y entres risas, para insistir: “Fue muy fuerte con mi familia, porque ellos me acompañan siempre, me respaldan en todas las locuras”, agrega para coincidir en que son un sostén.

“Totalmente porque desde el momento en que se conoció la noticia, la teníamos muy guardada primero porque hasta que no esté todo confirmado, ellos también estaban expectantes hasta que se concretó la posibilidad de estar en Qatar”.

_ ¿Algunos de tus hijos va a seguir tu camino, la profesión?

_ Hasta ahora ninguno. Lucas es el mayor, no. Gabriel que le sigue tampoco. Muchos de ellos creo que el hecho de estar mucho tiempo fuera de casa ellos saben que no hay cumpleaños, viajo mucho por las transmisiones, no he compartido fiestas, cumpleaños, Día de la Madre, me he perdido eso. Y ellos creo que por ese lado, me respaldan, están pendiente de mí, pero como que me dijeron: no, esto no es lo mío.

Después tengo a Celeste que está estudiando diseño gráfico, le gusta mucho el deporte, el fútbol, pero hasta ahora no se expresó para seguir; y está Nahiara que cursa el secundario, pero no sé. Está preguntando a partir del Mundial, pero hasta ahora ninguno de mis hijos sigue la profesión.

Un consejo

_ Viste que después del Mundial, muchos chicos, después de lo que paso con Gastón Edul, quieren ser periodistas deportivos. ¿Cuál es el consejo que vos le darías?

_ Yo siempre digo: primero, amar esta profesión, porque hay que saber que es sacrificada, que por allí uno recorre la carrera y no siempre está el reconocimiento, ni de la gente, ni tampoco a veces en lo económico. A veces no se consigue el reconocimiento, cuesta llegar, pero lo fundamental es ser apasionado. Si lo vas a hacer, hacelo con todo. Si lo vas a hacer, dedicarte con todo. Yo contaba que uno se pierde muchas fiestas, viajamos, estamos constantemente viajando. Yo siempre recuerdo una charla con un periodista en Córdoba, donde yo estudié periodismo, que nos dijo en la primera clase de periodismo deportivo: a quién le gusta pasar el Día de la Madre, comer un asado los domingos, a quién le gusta salir con los amigos o viajar solamente para vacacionar; y muchos levantaron las manos. El profesor le respondió: muchachos la puerta está ahí, se pueden ir. El periodista deportivo no tiene Día de la Madre, no tiene domingo, ni asados, siempre tiene que estar los fines de semana cuando la gente descansa y nosotros trabajando.

El periodista, fundamental, tiene que amar la profesión, dedicarse mucho, capacitarse. Hoy por hoy el periodismo deportivo necesita mucha capacitación y después depende de cada uno. También de la varita mágica, de estar en el lugar justo y preciso. Pero, fundamentalmente apasionarse por esa profesión y estudiar por supuesto.

_¿De qué equipo de fútbol sos, o no se dice?

_De chico era de River, pero a medida que va pasando el tiempo y se va dedicando a esto, empieza a perder ese fanatismo, empieza a ir dejando de lado porque tiene que ser dentro de lo posible objetivo; nunca terminamos de ser objetivos, pero si tratar de opinar como tiene que ser. Yo me sorprendo con mis hijos que son muy fanáticos, y digo: habré sido así yo, pero bueno la carrera te va formando y te va preparando.

Acá en Chaco me han vinculado mucho con For Ever porque yo sigo la campaña de Chaco For Ever durante estos 25 años y es inevitable que haya un ida y vuelta con la gente, que haya un cariño con la gente, por la campaña, porque nos sigue y nos escucha, pero también cuando tengo que criticar lp hago. Así que he dejado de lado esa parte de ser simpatizante.

_ ¿Cómo está For Ever hoy?

_ Y está en un proceso de armado porque el año que viene, se juega el Nacional B de nuevo, va a armar un plantel totalmente nuevo con un técnico que ya conoce que es (Diego) Osella. Va a ser un torneo difícil desde lo económico porque no escapa la situación económica del país al fútbol y los contratos se fueron a las nubes. Entonces, dentro de esa cuestión los dirigentes tienen que tener la capacidad y el técnico tiene que tener el convencimiento  para traer futbolistas que quizás no vengan por el dinero que van a ganar sino por el proyecto deportivo. Esperemos que el año que viene sea un año mejor a este que ha sido bastante difícil.

_Yo no sé nada de deportes, y menos de fútbol, pero el cambio de técnico a mí me sorprendió. ¿Eso estaba previsto?

_ Sí, Osella que ya estuvo cuando él se va sorprende. Yo había tenido una charla con él tres días antes de la renuncia después del partido con Atlanta. Y él me había dicho quiero quedarme, quiero armar un equipo, yo el año que viene quiero nuevos jugadores, porque él había heredado los jugadores, y me sorprendió que se haya ido.  Él renunció y me acuerdo que le fuimos a hacer una nota en el hotel por esa noticia, se lo pregunté ahora cuando vino y me dijo que lo que pasa es que habíamos trabajado muy bien, habíamos acomodado el equipo, habíamos ordenado física y futbolísticamente, pero no se nos daban los resultados. Entonces, faltaba que venga alguien que ya con el equipo armado consiga resultados. Y entendió él que se tenía que ir. Esa decisión que para él fue coherente me parece que le abre la puerta para que él vuelva y arme su equipo. Muchos no entendieron en aquel momento, yo tampoco, pero me parece que es el técnico adecuado para elegir los jugadores para la temporada que viene.

_ ¿Maradona, Messi, el Diablito?

_ Mirá Maradona, no vamos a descubrir lo que fue Diego para nuestra generación. Cuando Maradona deja el fútbol, los futboleros y el fútbol dijimos ¿Y ahora qué? Se fue el más grande de todo y que generaba magia dentro de sus problemas porque adentro de una cancha era otra cosa. Y un día apareció un rosarino jugando en Barcelona, un tal Leo Messi. Y lo vimos recorrer su carrera y empezó a generar magia y aquel amor de Maradona se trasladó a Messi .

Hoy Messi está en su recta final, yo creo que todavía falta algo en su recorrido para retirarse y yo estoy convencido de que va a jugar el Mundial 2026, que ese va a ser su último. Pero, está en la recta final y aparece Echeverri. O sea, Argentina es una tierra fértil en cuanto a futbolistas. Yo no digo, ni le estoy tirando toda la presión al Diablito Echeverri  de que sea Maradona o Messi, pero ya está apareciendo alguien que por lo menos va a deslumbrarnos, que va a generar esa expectativa, que vamos a verlo con la número 10 y que algo va a poder pasar. Eso nos pone muy contentos a los futboleros y creo que más a los argentinos que estamos acostumbrados a eso. Yo siempre digo, no es Maradona o Messi. Es Maradona y Messi  y ojalá en algún momento digamos Maradona, Messi y Echeverri.

Argentina es una tierra fértil en cuanto a futbolistas. Yo no digo, ni le estoy tirando toda la presión al Diablito Echeverri  de que sea Maradona o Messi, pero ya está apareciendo alguien que por lo menos va a deslumbrarnos, que va a generar esa expectativa, que vamos a verlo con la número 10 y que algo va a poder pasar.

Marcelo Mantaras

_ Y como que la historia se repite al día de hoy. Con el Diablito parecía que en el Mundial Sub17 iba a ser para Argentina, pero al final no fue. Vi tus posteos de apoyo a él porque entiendo que la gente lo criticó. Pero, también criticaron a Maradona y a Messi.

_ Lo que pasa que queremos que él sea ya Messi, y tiene que madurar. Es un pibe de 17 años que recién está empezando a construir su carrera. De hecho ha jugado pocos minutos en River (primera), es más, creo que va a seguir jugando pocos minutos en River porque para mí se nos va. Va a ir a Europa, hay clubes que están buscando levárselo, tienen euros y acá 25 millones o 30 millones de euros es nada para ellos, y lo pueden llevar. Me pareció que al haber quedado afuera, no digo todos, porque los chaqueños lo defendemos todos porque es nuestro, pero hay un sector que ya empezó a decir: mirá no apareció en la final, o desapareció en la final, y lo mismo criticaron al arquero de Argentina porque no pudo tener una buena actuación y Messi pasó por eso. Pasó por las críticas, porque no cantaba el himno, porque tal cosa, por esto, por lo otro, y creo Messi enseñó que hay un proceso y que hay un momento. Y que en algún momento se da. Y creo que el Diablito tiene mucho por recorrer todavía  y me parece que hay que respaldarlo y acompañarlo. No hay que tirarle toda la presión a él todavía porque es un pibe. Ya habrá oportunidad de que él asuma ese rol de ser responsable de llevar un equipo adelante.

_ Esas críticas que existen hacia los jugadores nacen no tanto de la gente, sino más del periodismo deportivo, de los periodistas de la Capital, ¿vos tenés una opinión formada respecto a eso?

_  Sí, no nos olvidemos que hay cosas. Por ejemplo la crítica a la Selección Argentina y a Messi antes de la Copa América era terrible. Voltear a Scaloni era uno de los principales objetivos de un sector del periodismo. Vos sos periodista, sabemos como periodistas que hay intereses, hay grupos empresariales y un montón de cuestiones. El periodismo porteño muchas veces tiene esa cuestión de defender a algunos y de criticar a otros, y con Messi eran muy duros. Pero también está un sector de la sociedad que detrás de una computadora y las redes sociales expresa quizás su bronca, su impotencia, lo que le pasó en el día, lo que le pasa en el mes, y es más fácil usar la rede social y criticar duramente a un pibe como se criticaba a Messi. Que se yo, decirle a Messi “sos un fracasado, no ganaste nada” y estás sentado en una computadora. ¿Vos jugaste alguna vez un partido de una Champios League? Pero también la sociedad detrás de las redes sociales es muy cruel, pero  por suerte la mayoría valoramos y respetamos a estos personajes, especialmente como Messi que tiene una gran vida como futbolista y también como persona en la sociedad.

_ Esas críticas se ve que se expande por en el mundo. ¿Viste la serie de David Beckham?

_ La vi. Hay cosas que no sabía de cómo él vivió. Era un rebelde sin igual, pero fue muy duro. Esa parte no la conocía. Y ahí te muestra que en un país como Inglaterra fue muy criticado, en su país, su selección, al punto de largar todo y también la posibilidad de volver y ser un ídolo dentro del fútbol. Pasa en Argentina y en todo el mundo.

_ Yo cuando lo vi, me imaginaba lo que pudo haber pasado Messi. Con Maradona no tanto porque era muy chica y no le entendía.

_ Sí, es difícil ponerse en la mente de Lionel, pero que difícil debe ser que periodistas de programas deportivos fundamentalmente digan que no venga más a la Selección, que no ganó nada, que juega desganado, que no canta el himno, y él siguió viniendo a las convocatorias y cuando renunció después de aquella Copa América de la Selección pasó un tiempo y quiso volver. Pero debe ser difícil porque los deportistas son competitivos y quieren ganar. Es imposible que digan que un deportista no quiere ganar o que es pecho frío como le decían. Es muy difícil para el deportista y su familia.

Por eso en el Mundial esa imagen de él diciendo ya está. Ayer estaba viendo una serie por Star, y se ve el desahogo, viniendo al palco. Mira el palco de sus padres y su señora y hace señas como diciendo ya está, ya lo logré. Yo en la final estaba cerca del papá de Messi, a diez metros, y lo miraba. Tenía temple, quizá yo como padre hubiese actuado de otra manera. Pero cuando Francia estaba empatando como sufría, ese hombre se ponía entre las rodillas. Después que sale campeón del mundo abrazó a su señora, a su nuera. Era el reflejo del desahogo de Lionell y su familia. No debe ser fácil. También le habrá pasado a Maradona. Imagino que lo debe estar viviendo el Diablito ahora.

Espero que con Tapia limen asperezas y podamos tener Sacaloni por mucho tiempo. Las expectativas (por la Copa América) son enormes. Tengo mucha fe de que Argentina pueda darnos una alegría más, y que esa alegría pueda ser la inyección que le está faltando a Lio para que llegue al 26 y me retiro en Estados Unidos.

Marcelo Mantaras

_ ¿Cuál es la expectativa por la Copa América?

_ Es una ilusión más la Copa América. Más allá del movimiento, o del temblor que generó Sacaloni el otro día en la conferencia que dejó la duda de si seguía o no. Espero que con Tapia limen asperezas y podamos tener Sacaloni por mucho tiempo. Las expectativas son enormes,  aparte somos campeones de América aparte de campeones del Mundo. Desde Brasil se sacó una mochila,  y lo mostró en las eliminatorias, es un equipo que juega de memoria, que ya no le pesa. Que fue y ganó en Brasil, entonces hay muchas expectativas para el año que viene. Tengo mucha fe de que Argentina pueda darnos una alegría más, y que esa alegría pueda ser la inyección que le está faltando a Lio para que llegue al 26 y me retiro en Estados Unidos.

_ ¿Con Scaloni qué crees que está pasando?

_ Creo que va más allá de cuestiones contractuales o del dinero, se hablaba del premio que no se pagó. Que hay unas cuestiones más directas con el presidente, con Tapia, hay cosas que a él no le gusta, que quiere jugar con selecciones competitivas, equipos  europeos, y  a veces AFA prefiere ir a China y jugar con equipos de tercera categoría por el dinero más que el rival. Y Scaloni piensa más en un equipo con la vara más alta para llegar bien a la Copa América. Y después el día a día, no debe ser fácil ser ni Sacaloni, ni Tapia, porque cada uno defiende sus intereses, y debe haber un día a día muy difícil. Aparte hay un proceso largo. Creo que va por ahí. Esperemos que puedan limar asperezas, que pueden, no sé si resignar de un lado o del otro, pero sí pensar en la selección y que se pueda disfrutar de este momento, poder disfrutar del mejor momento de Argentina en mucho tiempo.

  _  Hablaste de lo económico que le va a tocar enfrentar a For Ever ¿Qué opinás de las Sociedades Anónimas en los clubes?

_  Es un tema que se discutió mucho, se planteó desde AFA e incluso hubo un respaldo mayoritario de los clubes salvo Talleres de Córdoba que está prácticamente gerenciado, es una empresa detrás del  y que tiene la idea su presidente de llevarlo a una Sociedad Anónima.  Pero la mayoría de los clubes depende de los socios, yo creo que está bien. Yo no digo que las empresas no apoyen, incluso los respaldan, pero tienen que seguir siendo de los socios. Algunos quieren comparar con Inglaterra y otros países, no es la misma economía ni cultura.

Sin ir más lejos For Ever, la empresa Sol de América vino a gerenciar hace unos años, la consecuencia de eso fue deudas, se fue, y el responsable fue For Ever. Si pasa que una empresa viene invierte y cuando le va mal se va, y cuando se van retiran los suyo, los que van a terminar pagando son los socios y se pueden encontrar con una quiebra o con un periodo de quiebra como le pasó a For Ever. Los clubes tienen que ser de los socios, de la gente y los dirigentes ser coherentes con eso, porque también digamos lo otro, que lo dirigentes que pagan contratos millonarios y después no tienen de donde sacar el dinero.

_ ¿Pero, las SA, es la puerta para cerrar los clubes de barrios dónde salen los grandes jugadores que tiene Argentina?

_ Sí. Porque el hecho de privatizar los clubes, es que las sociedades anónimas ellos toman las decisiones. Por ejemplo si a Riestra que ascendió ahora, lo quieren privatizar, es un club chico, no tiene convocatoria. Supongamos que una empresa ponga dinero, hago un estadio grande, ¿cuánto puede durar? La cultura nuestra es diferente, la economía es fluctuante. Va a ir en contra de lo que vos decís, el pibe que no tiene para pagar la cuota no podrá jugar, y cuántos Echeverri y cuántos Messi podemos perder ahí.  O al revés, se lo van a chupar y van a hacer los grandes negocios las empresas.