Putin se enoja cuando otros líderes critican la agresión rusa en Ucrania
En su primer discurso ante funcionarios del Grupo de las 20 principales economías desde su invasión de Ucrania, el presidente ruso, Vladimir Putin, rechazó el miércoles las críticas de que la agresión bélica fue «escandalosa» y acusó a las naciones occidentales de doble standard por su respuesta al conflicto entre Israel y Hamás.
En su comparecencia en una reunión virtual del G20, calificó la guerra en Ucrania de «tragedia» que debe detenerse y afirmó que Rusia «nunca se ha negado» a entablar negociaciones de paz.
Para Putin, fue una rara interacción con líderes occidentales desde el inicio de la guerra el año pasado.
También era la primera vez que tenía que escuchar críticas directas y públicas a la invasión en un acto internacional.
Una vez que tuvo la oportunidad de responder, Putin no pudo ocultar su irritación.
«Algunos colegas ya decían en sus discursos que estaban conmocionados por la agresión rusa en curso en Ucrania», dijo Putin.
«Las acciones militares son siempre una tragedia para personas concretas, familias y el país en su conjunto, y tenemos que pensar en formas de detener esta tragedia».
Putin pronunció su discurso de ocho minutos en un acto organizado por la India como continuación de una reunión presencial del G20 celebrada en septiembre.
La difícil situación de la población civil en la Franja de Gaza, que calificó de «exterminio», también fue chocante, dijo, dando a entender que Occidente estaba dispuesto a pasar por alto la agresión allí.
También repitió la frecuente afirmación de Rusia de que Ucrania había actuado agresivamente contra su propio pueblo en el Donbass en 2014, calificándola de chocante.
Fue otro ejemplo de una táctica a la que Putin y otros altos funcionarios rusos han recurrido en los últimos años:
acusar a Occidente de transgresiones, a menudo tergiversando la realidad, como forma de desviar la atención de las suyas propias.
Putin se refirió a los combates en Ucrania como una guerra, en lugar de utilizar el eufemismo del Kremlin de «operación militar especial».
«Comprendo que esta guerra y la pérdida de vidas humanas no pueden sino conmocionar», dijo.
Argumentos
Putin repitió la línea oficial de Rusia de que el Kremlin estaba dispuesto a negociar y culpó a Ucrania de rechazar las conversaciones.
«Rusia nunca ha rechazado las conversaciones de paz con Ucrania», dijo Putin.
«Fue Ucrania, y no Rusia, quien anunció públicamente que se retiraba del proceso de negociación».
Sin embargo, a pesar de su discurso de negociación, Putin no ha mostrado ninguna voluntad de ceder en su objetivo de volver a someter a Ucrania al dominio ruso, y mucho menos de dar marcha atrás en su declaración del año pasado de que cuatro regiones del sur y el este de Ucrania forman parte de Rusia, incluido el territorio que el ejército ruso no controla.
Ucrania ha alegado la necesidad de liberar todo el territorio ocupado por Rusia antes de poder negociar la paz.
Putin también enumeró varios agravios que Rusia tiene contra Occidente, como el derrocamiento en 2014 en Ucrania de su presidente de tendencia rusa, Víktor Yanukóvich.
El discurso del líder ruso puso de relieve cómo el mundo ha quedado fracturado por la guerra.
Cuando se celebró la cumbre del G20 en septiembre, la ausencia de Putin -así como la del líder chino Xi Jinping– fue un claro indicio de la ruptura del consenso mundial.
Mientras que el presidente Joe Biden asistió en representación de Estados Unidos, Rusia estuvo representada por su ministro de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, y China por su primer ministro, Li Qiang.
La guerra en Ucrania había ensombrecido durante mucho tiempo la celebración del G20 en la India este año, ya que los desacuerdos sobre el conflicto dificultaban el consenso.
India, anfitrión rotatorio del grupo este año, trató de mantener la agenda centrada en cuestiones que iban desde el aumento de la deuda mundial hasta la financiación de la lucha contra el cambio climático.
Su liderazgo en la cumbre puso a prueba como nunca antes el equilibrio de India entre su aliado histórico, Moscú, y sus crecientes relaciones con Estados Unidos y Europa.
India quería centrarse en el costo económico del conflicto para las naciones más pobres.
Sin embargo, durante las negociaciones, los países occidentales, encabezados por Estados Unidos, quisieron imponer la condena de la invasión rusa de Ucrania en todos los debates.
c.2023 The New York Times Company
Source link